La sinapsis neuronal es cinco veces menor con este mal.
Las conexiones entre estas células cerebrales podrían explicar el deterioro cognitivo asociado al Alzheimer.
Los cerebros humanos afectados por la enfermedad de
Alzheimer se caracterizan por presentar regiones con ciertas estructuras
patológicas asociadas a la dolencia, como las placas amiloides. El
número de contactos sinápticos (uniones interneuronales) en estas zonas
son hasta un 83% menores que en aquellas que permanecen alejadas de la
influencia de estas estructuras, según demuestra una investigación
liderada por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).
El hallazgo, publicado en 'Journal of Alzheimer’s Disease',
se ha realizado a través del estudio de muestras de diferentes regiones
cerebrales de cinco donantes que padecieron en vida la enfermedad de
Alzheimer. A través de su análisis, el equipo ha logrado reconstruir
imágenes en 3D de las muestras que permiten determinar exactamente el
número y la distribución espacial de las sinapsis neuronales.
Los resultados, además de mostrar una notable disminución
de sinapsis en las regiones afectadas, señalan que, en estas últimas, la
distribución espacial de los contactos sinápticos se concentran en los
espacios libres que dejan las estructuras patológicas asociadas a la
enfermedad.
El investigador del Instituto Cajal Javier de Felipe del
CSIC, que desarrolla su actividad en el Centro de Tecnología Biomédica
de la Universidad Politécnica de Madrid y que ha liderado la
investigación, considera que «estas alteraciones sinápticas suponen una
perturbación en las conexiones interneuronales, lo que podría explicar,
en parte, el deterioro cognitivo asociado a la enfermedad de Alzheimer».
Esta dolencia afecta a unos 35,6 millones de personas en el
mundo y, a pesar de haber sido descubierta hace más de 100 años, De
Felipe señala que «aún hoy se desconoce cómo y porqué ciertos circuitos
corticales normales se alteran e inducen el deterioro cognitivo».
Información procedente de: http://www.elcorreo.com
Los cerebros humanos afectados por la enfermedad de
Alzheimer se caracterizan por presentar regiones con ciertas estructuras
patológicas asociadas a la dolencia, como las placas amiloides. El
número de contactos sinápticos (uniones interneuronales) en estas zonas
son hasta un 83% menores que en aquellas que permanecen alejadas de la
influencia de estas estructuras, según demuestra una investigación
liderada por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).
Los resultados, además de mostrar una notable disminución
de sinapsis en las regiones afectadas, señalan que, en estas últimas, la
distribución espacial de los contactos sinápticos se concentran en los
espacios libres que dejan las estructuras patológicas asociadas a la
enfermedad.
El investigador del Instituto Cajal Javier de Felipe del
CSIC, que desarrolla su actividad en el Centro de Tecnología Biomédica
de la Universidad Politécnica de Madrid y que ha liderado la
investigación, considera que «estas alteraciones sinápticas suponen una
perturbación en las conexiones interneuronales, lo que podría explicar,
en parte, el deterioro cognitivo asociado a la enfermedad de Alzheimer».
Esta dolencia afecta a unos 35,6 millones de personas en el
mundo y, a pesar de haber sido descubierta hace más de 100 años, De
Felipe señala que «aún hoy se desconoce cómo y porqué ciertos circuitos
corticales normales se alteran e inducen el deterioro cognitivo».
Información procedente de: http://www.elcorreo.com