Cómo ser más compasivos con las personas con demencia.

La
iniciativa está tratando de alentar a todo el público a ser más consciente de las necesidades de las personas mayores con demencia y
ayudarlas en su vida diaria.
Durante
dos horas, 11 miembros del personal estuvieron reunidos en una sesión
ardua que comenzó con una simple prueba de memoria. Yo estuve presente en
una sesión de entrenamiento en un depósito de autobuses en una parte
industrial del noroeste de Londres, donde se guardan 100 autobuses y que
es la base de trabajo de 300 conductores.
El
entrenador, Keith Shear, dijo a los conductores que era un ejercicio
sencillo. Les pidió que dibujaran ambas caras de una moneda de 1
penique, con todos los detalles posibles que pudieran recordar.
“¡Es facilísimo -bromeó- ustedes manejan esas monedas todos los días!”.
Se escucharon gemidos de algunos conductores que no lograban recordar los detalles o las palabras de la moneda.
Quienes lograran dibujarlas correctamente podían obtener doce puntos. Pero los participantes sólo obtuvieron entre dos y cinco.
Keith
puso el ejercicio en el contexto de la demencia y dijo a los
conductores: “imagínese que ustedes olvidaran los detalles de cada
aspecto de su vida -tomar desayuno, cómo vestirse- sólo imaginen lo
frustrante que eso sería”.
Posteriormente
se pidió a los participantes que escribieran en distintos pedazos de
papel sus posesiones más preciadas: el nombre de su ser más querido, una
habilidad que los hacía sentir orgullosos o un recuerdo atesorado.
Keith recogió los papeles de cada persona.
Y
les dijo: “Yo soy su demencia en este momento de su vida. Piensen por
un momento lo que sería su vida si les hubiera quitado esas posesiones”.
“Y
si creen que no puede haber nada peor que eso, están equivocados.
Porque con el paso del tiempo voy a regresar y a llevarme todo lo que
tienen. Se quedarán sin nada”.
Los
participantes admitieron que el ejercicio era muy emotivo y muy difícil
de aceptar. Inevitablemente comenzaron a surgir historias sobre
experiencias familiares.
Pasajeros “problemáticos”
En
un autobús hay barreras para poder tener una buena comunicación, como
la pantalla que protege al personal en las ciudades contra los asaltos.Y
los conductores admiten que si alguien parece problemático en un
autobús, su primer instinto es tratar de expulsar a ese pasajero. Pero
ahora sienten que deben ser extra vigilantes por lo que ese pasajero
puede estar pasando, particularmente si se trata de alguien que no tiene
aliento alcohólico.
“Necesitan
ser conscientes de las dificultades que una persona con demencia tiene
para enfrentar el día, la fecha y hora” explica Keith.
“Quizás
ustedes me están diciendo que mi pase de autobús ha expirado o que sólo
lo puedo usar después de las 9.30. Pero el tiempo no tiene ningún
significado para mi. Yo no entiendo sus puntos de vista o porqué se
están enojando tanto conmigo”.
Los
conductores recibieron consejos sobre cómo sonreír y hacer contacto
visual, dejar que el pasajero se sentara para que pudiera serenarse y no
arrancar el autobús deprisa si el individuo no parecía muy firme.
Cerca de 3.000 conductores recibieron ya el entrenamiento. Y se espera que muchos más en todo el país también lo reciban.
Andrew Chidgey, de la organización Alzheimer’s Society,
que está ayudando a dirigir las sesiones, acepta que los servicios de
salud necesitan desempeñar un mayor papel en el tratamiento de las
personas con demencia. Pero agrega que ayudar a los pacientes de esta
forma práctica, entrenando a los conductores, también es vital.
“Para
los conductores esto significa que tienen un papel realmente importante
para ayudar a la gente en su comunidad a mantenerse independientes”
dice el funcionario.
“Y esto también se aplica a otros trabajadores, como los que venden el periódico u ofrecen otros servicios”.
Una
de las participantes, Krystyna Ryan, de 59 años, dijo que “los
conductores necesitan ser capaces de ayudar a los pasajeros que tienen
problemas de salud, en especial demencia, porque no siempre se habla o
se reconoce esta enfermedad”.
Información procedente de: http://envejecerenpositivo.wordpress.com